“Todo lo que el hombre puede hacer por sí mismo, ni siquiera
él lo sabe. Una escala determinada de tiempo y una cosa intangible y fantasmal
llamada cambio están latiendo en él” Loren Eiseley.
Introducción.
A lo largo de las últimas décadas, la evidencia empírica ha
puesto de manifiesto que, en el ámbito de la teoría económica, el nivel
educativo de los individuos constituye un elemento fundamental para explicar la
productividad del trabajo, los niveles salariales, así como los flujos de
entrada y salida del mercado laboral. En este contexto, numerosos economistas
han tratado de explicar la relación causal entre educación, empleo y salarios,
lo que ha dado lugar a múltiples formulaciones teóricas y enfoques analíticos
muy diferentes.
El Capital Humano.
La teoría del capital humano representa el primer intento
formalizado de vincular el nivel educativo alcanzado por los individuos y su
situación en el mercado de trabajo.El origen del Capital Humano.
Durante la primera mitad del siglo XX gran cantidad de economistas,
seguidores de A. Marshall mostraron una tendencia a utilizar el concepto de
capital como aplicable únicamente a aquella porción del capital no humano,
físico, como stock de riqueza producido por el hombre y que es utilizado
directamente en la producción. Luego, a mediados del mismo siglo, con Schultz
al frente, se produjo un renacimiento de la aplicación del concepto de capital
al hombre. Esta postura se reflejó en una gran cantidad de publicaciones
económicas de Estados Unidos. De aquí se puede extraer una definición
tradicional de capital humano, que supone el conjunto de habilidades, talentos
y conocimientos de un individuo. La adquisición de estas capacidades implica
ciertos procesos comunes: la educación formal, el entrenamiento en el trabajo y
la experiencia laboral.
La teoría del capital humano específico.
La teoría del capital humano distingue entre formación académica y específica. La primera de ellas aporta al individuo conocimientos generales que se obtienen básicamente de la formación escolar, y puede ser utilizada como herramienta válida para cualquier empresa. Por el contrario, el capital humano específico engloba aquellos conocimientos y habilidades que se aprenden en el puesto de trabajo y sólo son útiles en el mismo.
La teoría del emparejamiento (job matching) considera que los desajustes entre el nivel de estudios del trabajador y las necesidades educativas del puesto de trabajo se derivan de la existencia de información imperfecta en el mercado de trabajo.
Teoría de la movilidad profesional o career mobility (Sichman y Galor, 1990).
La teoría de la movilidad profesional considera que la existencia de desajustes educativos en el
De esta forma, se considera que cada trabajador elige su
trayectoria ocupacional óptima, de
manera
que pueda acceder sucesivamente a ocupaciones de mayor status, gracias a la
acumulación de conocimientos y experiencia.La teoría del capital humano y las competencias en la educación.
En el marco que compete a este estudio, es importante mencionar que la UNESCO estableció una política educativa sobre la manera de aprender de los individuos, la cual contemplaba que para que se lograra la apropiación del conocimiento, además de las habilidades y destrezas, se le debía dar énfasis a “Aprender a aprender”, aprender “a ser” y aprender “a hacer” durante la formación del estudiante, lo cual rescata la esencia del modelo educativo basado en competencias.
Es una inversión en educación.
La inversión en educación aparece como un elemento determinante de las trayectorias laborales de los individuos y se espera que aquéllos que hayan realizado mayores inversiones educativas tengan más éxito en el mercado de trabajo (en términos de participación, ocupación, categoría laboral, estabilidad en el empleo, ingresos, etc.) que los individuos cuya inversión educativa haya sido menor. Esta idea, aportada por Becker (1962), representa uno de los principales pilares dentro de la teoría del capital humano.
Se debe tener en cuenta dos tipos de costes. Por un lado, los denominados costes directos que son aquéllos directamente ligados al proceso educativo (matrículas, tasas, libros, material de apoyo, transporte escolar, etc.). Por otro, el individuo debe considerar el coste indirecto o de coste de oportunidad que genera la inversión educativa, representado por el salario al que el individuo renuncia al no dedicarse a trabajar a tiempo completo.
A cambio de incurrir en estos costes, los individuos esperan que su aumento en la productividad se vea recompensado en el mercado de trabajo a través de una serie de beneficios.
Por lo tanto, el objeto de la educación es formar a seres aptos para gobernar a sí mismo y no para ser gobernados por los demás.
Para finalizar os dejo un breve reportaje en el cual
aseguran que la clave del futuro en España está en el Capital Humano y por
tanto hay que aprender desde la infancia.
Referencias bibliográficas:
http://www.injuve.es/sites/default/files/9321-03.pdf
http://www.turevista.uat.edu.mx/ANO%206%20NUMERO%2022/modelo-humano.htm
No hay comentarios:
Publicar un comentario