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lunes, 15 de abril de 2013

La Brecha Digital.

¿Qué es la Brecha Digital?

La Brecha digital hace referencia a la diferencia socioeconómica entre aquellas comunidades que tienen acceso a los beneficios de la sociedad de la información y aquellas que no, aunque tales desigualdades también se pueden referir a todas las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), como el ordenador personal, la telefonía móvil, la banda ancha y otros dispositivos.
Usuarios de Internet

 Siempre ha existido la brecha digital, es decir, siempre ha existido que algunas personas, por sus características de edad, de género, de situación económica, o visión cultural, se han visto privados a acceder a determinadas tecnologías.
 
 
 
 

¿Hay que evitar la brecha digital?

 Investigando en internet sobre la brecha digital he encontrado una opinión muy interesante publicada en El País de Beñat Bilbao-Osorio (director asociado y economista del Centro de Competitividad y Rendimiento Global) titulada: "¿Hay que evitar la brecha digital?" , en la cual destaca que mientras algunos países han consolidado su liderazgo en el panorama digital, otros siguen muy atrasados y con pocos o ningún síntoma de mejoría.

Los países que tienen mejores índices de conectividad, y gracias a ello, unas tasas de innovación muy elevadas que contribuyen a impulsar su competitividad son: los países nórdicos, Asia y varias economías avanzadas de Norteamérica y Europa occidental.

Señala que aproximadamente el 90% de los hogares en estos países poseen un ordenador y una conexión a Internet y como consecuencia, el uso de la Red, tanto por parte de las empresas como de los consumidores, es alto, y ello repercutirá a la economía en general. Todo lo contrario ocurre en países en vías de desarrollo, por lo que ya se está produciendo una distinción entre ellos. Sin embargo, es preciso alentar a los países a que tomen las decisiones inversoras y adopten las políticas adecuadas para desarrollar sus TIC, sin olvidar que pueden tardar tiempo en dar fruto.

Por último, destaca que es imprescindible un umbral mínimo de inversiones y desarrollo de aptitudes para que cualquier país obtenga buenos resultados. Cada país tiene que poner de su parte para lograr adaptarse al cambio que conllevan las nuevas tecnologías.

 

Referencias bibliográficas: